El Corán es la última palabra de Dios a la humanidad. Contiene todo lo que los seres humanos necesitan para adorar a Dios y vivir una vida buena y plena mientras se preparan para su vida en el más allá. Para ello, el Corán nos enseña los temas más importantes que debemos conocer.
El Corán se centra en gran medida en el establecimiento de creencias adecuadas. Sin la creencia correcta en el Único y Verdadero Dios, no habrá éxito final. Dios nos dice que reflexionemos sobre los signos que ha puesto para nosotros. Los signos en el universo, en nuestra propia creación y en nuestros cuerpos, y en los ciclos vitales que vemos a nuestro alrededor. Dios se describe a Sí mismo ante nosotros mencionando Sus nombres y atributos, ya que éstos nos permiten amarle, reverenciarle y adorarle mediante la gratitud y la obediencia. Esto crea en nosotros un sentido de conciencia de Dios que garantiza que nuestra creencia en Dios esté arraigada en el corazón y sea coherente en público y en privado.
Dios también nos habla de la realidad de la muerte y de la vida después de la muerte. Mediante la creencia en el Día del juicio, sabemos que todo lo que hagamos en esta vida será cuestionado y juzgado por Dios y que tendremos que rendir cuentas. Nadie puede escapar al juicio divino. Dios nos habla de Satanás y de sus tramas malignas para que seamos conscientes de ellas y aprendamos a protegernos de ellas. Dios también menciona otros sistemas de creencias y religiones creadas por el hombre y sus falsedades y contradicciones.
El Corán se centra en historias de las naciones del pasado, de los mensajeros de Dios y de sus seguidores y adversarios. Las historias abarcan numerosos incidentes de la vida del mensajero Muhammad. Estas historias contienen lecciones, moralejas y principios. Por ejemplo, la historia puede tratar de las luchas que tuvo un mensajero de Dios con su familia o su salud. La historia nos contará las características que mostró el Mensajero y la forma en que superó esa dificultad y prueba. Esas lecciones se aplican a cualquiera que se encuentre en una situación similar.
El Corán habla de leyes y mandamientos. Son las obligaciones que Dios nos ha impuesto, como en la adoración ritual, los parámetros en las transacciones financieras y las normas familiares. Esto permite a los musulmanes comportarse de la manera más agradable a Dios y beneficiosa para los demás. Estos mandamientos también contienen prohibiciones de actos perjudiciales como el aborto, el asesinato y el robo, o de vicios que dañan a la persona como la fornicación, la sodomía, el adulterio, la bebida y el juego.
El Corán habla del desarrollo del carácter. Nos anima a incorporar atributos buenos y nobles que nos ayuden a protegernos de Satanás y, al mismo tiempo, nos beneficien a nosotros mismos y a los demás. Se trata de cualidades como el recuerdo de Dios, ser honesto y amable, ser misericordioso con los demás, la generosidad e ignorar a los insensatos. También se incluye lo contrario: características que son malas y perjudiciales, como ser avaro, mentir y engañar.
De forma similar al último punto, el Corán también se centra en el desarrollo espiritual del carácter. Esto incluye acciones que son internas y proceden del corazón. Por ejemplo, amar a Dios, confiar en Él, esperar Su recompensa y temer Su castigo. Asimismo, también se destacan las características espirituales perjudiciales, como la ira, los celos y el orgullo.
El Corán ofrece a la humanidad una guía completa y sana a través de los temas y asuntos que aborda. El camino de la salvación consiste en aplicar el Corán en la propia vida para ganarse el favor de Dios y tener éxito en esta vida y en la otra.
discount rifaximin price uk
how to buy rifaximin cheap prices